Olvidar su voz lo hizo más difícil.

Que su cara nunca llegó a verla.

Al final de esta historia, ya casi había olvidado también el momento exacto en que se conocieron. Él dice que el pasado es lo único que no se puede cambiar, que por eso es mejor dejarlo ir, a veces incluso descartarlo.

Se escribían cartas de regularidad semanal, manuscritos asimétricos en forma de ensayo emocional como si todo lo que acontecía alrededor nunca pudiese cambiar el guion establecido de los días.

Que los días antes duraban más.

La pena menos.

En la última carta del mes nueve ella rompió las normas establecidas. Todas las relaciones se basan en las normas,........

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