El día que los argentinos pudieron hablar en catalán
Tenemos cinco ejemplos, que no son los únicos, de grandes lenguas que arrinconaron a otras sin que nadie las impusiera.
En orden cronológico, el primero fue el griego, que se instaló en los grandes imperios de su época y algunos más tras la campaña de Alejandro Magno.
El segundo fue el latín, que se extendió por el vasto Imperio como lengua cultural tan poderosa como el ejército que la llevó, y eclipsó a las otras, a todas las que se hablaban en dominios bañados por el mediterráneo.
El tercero fue el árabe, lengua del Corán que acompañó al islamismo y desplazó al latín del norte de África y Oriente Medio, pero no al latín de Hispania, que ya empezaba a ser hablado en dialectos. España, que estuvo ocupada ocho siglos por el Islam, podría hablar árabe, y el árabe, hecho más improbable pero posible, haber viajado en las carabelas de Colón. A aquellos marineros no les habría importado porque lo sustancial no es el nombre de la lengua, sino disponer de una, la necesaria en cada momento.
El árabe no estuvo ocho siglos en........
© Vozpópuli
visit website