En el mundo del marketing, el concepto de “funnel de ventas” o embudo de ventas es fundamental para entender cómo las empresas convierten a un prospecto en cliente. Este embudo consta de varias etapas: atracción, interacción, conversión y fidelización.

Curiosamente, el fenómeno musical Taylor Swift que tanto hemos visto y escuchado estos días tras sus conciertos en Madrid puede ser analizado mediante este mismo modelo, ya que su carrera y su relación con los fans demuestran una ejecución casi perfecta del funnel de ventas.

La primera etapa del embudo es la atracción, donde el objetivo es hacer que el público objetivo sepa de tu existencia. Taylor Swift, desde el inicio de su carrera, ha demostrado una habilidad innata para captar la atención del público. Su debut en la música country la puso en el radar de los aficionados al género.

La estrategia de Swift en esta etapa puede compararse con una campaña........

© La Región