No hay nada más emocionante que ver a la ciudadanía en las calles y en diversas plazas del país y de otras naciones, defendiendo nuestra democracia.

Las imágenes de un Zócalo vestido de rosa, entonando el Himno Nacional y gritando “la ley es la ley”, no sólo enchinan la piel, sino que son la muestra de que la ciudadanía está despierta y dispuesta a defender sus derechos y libertades contra aquéllos que hoy pretenden destruir nuestra democracia.

Hoy como nunca es indispensable abrirle el paso a la ciudadanía y dejar que sean ellas y ellos quienes sean los protagonistas de nuestra historia.

Desde la distancia celebro y celebré la concentración a la que acudieron las y los ciudadanos que de manera legítima y en libertad, acudieron a la cita. Es la ciudadanía la verdadera oposición de este mal gobierno y del inquilino de Palacio Nacional. Son ellas y ellos los que definirán el presente y futuro de México a través de su voto, y es por eso que es extraordinario que sean éstos los que levanten la voz y defiendan por lo que por décadas hemos luchado, nuestra democracia.

El hecho de que nuestra bandera no se ondeara en la plancha del Zócalo es el reflejo de autoritarismo y de control absoluto que ejerce el inquilino de Palacio Nacional. Se le olvida que estos pequeños detalles lo pintan de cuerpo entero y ratifican, sin duda, que su permanencia en el poder Ejecutivo no le hace bien al país.

Lo mismo que su candidata de la continuidad, pues al señalar “falsedad e hipocresía” de quienes acudieron a la concentración, lo único que demuestra es que el odio, la polarización y la división del país seguirán, justo lo que la ciudadanía ya no quiere más.

Tiene razón Lorenzo Córdova cuando señala que “ni la Constitución ni la bandera son propiedad de nadie… es algo que nos pertenece a todas y todos. Hoy todo está bajo amenaza, pasamos más de 40 años construyendo una escalera democrática, y hoy, desde el poder, quien llegó a ese primer piso por libre voluntad de la ciudadanía, pretende destruir esa escalera para que nadie más pueda transitarla”.

Sigamos defendiendo nuestra democracia, sigamos saliendo a las calles, porque México es un país plural que nos pertenece a todas y todos. Por la democracia unamos esfuerzos.