El pasado 17 de octubre, a dos décadas de la guerra del gas/masacre en El Alto, se realizó un cabildo convocado por la dirigencia arcista del Pacto de Unidad. Era la respuesta al congreso del MAS-IPSP, de la facción evista, celebrado días antes en Lauca Ñ. Había que lograr un empate en la precoz disputa interna por la candidatura presidencial 2025. El cabildo concluyó con un manifiesto y 19 mandatos entregados con gran ruido y júbilo al presidente Arce.

Transcurridos tres meses del “cabildo del pueblo”, ¿cómo van los mandatos que, en el papel, en los discursos, debían iniciar “la reconstrucción del proceso de cambio”? De los 19 puntos, siete eran solo declarativos o exigencias de coyuntura. Los otros 12, en cambio, implicaban acciones y, en su caso, resultados. “Vamos a hacer cumplirlo”, prometió Lucho tras recibir el documento. A la fecha, el saldo general es de incumplimiento o, peor, olvido.

Entre los mandatos había uno estratégico y otro instrumental. El primero era la conformación de una comisión política para elaborar una tesis política que defina el horizonte patrio, incluyendo nueva agenda y programa de gobierno. No hay noticia de tal comisión ni, por tanto, de la proclamada tesis. El segundo mandato era convocar al “verdadero” congreso del MAS-IPSP. No hay ni habrá dicha convocatoria. No puede haberla al margen del partido bajo control del evismo.

Hubo nueve mandatos específicos para el Órgano Ejecutivo. ¿En qué están? No se conformó un gabinete social ni se ajustó el equipo de (vice)ministros, no se convocaron un congreso de salud ni tampoco uno de educación, no se desterraron la corrupción y la burocracia ni se sancionó “ejemplarmente” a los verdaderos narcotraficantes, en fin, no se fortaleció la lucha contra el contrabando. ¿Se profundizó la integración de las organizaciones comunitarias con la industrialización? ¿Hubo medidas rápidas contra la deforestación y la contaminación? ¿Se impulsaron acciones de emergencia contra la crisis climática? No saben/no responden.

Claro que 90 días son pocos para tantos mandatos, algunos de ellos de carácter estructural (como el dirigido al Órgano Judicial de “implementar de forma inmediata y urgente la reforma total del sistema de justicia”). Pero al menos algo del manifiesto, hoy desaparecido, podría estar en agenda. Así, el cabildo oficialista alteño, igual que los cabildos cívicos (en especial cruceños), demuestran que la mayoría de sus resoluciones y mandatos, sobre los cuales no hay deliberación alguna, son solo papel mojado.

Hay que debatirlo. A no ser que “Lucho no estás solo” nos sorprenda mañana con cambios en el gabinete.

1. ¿Cuántos policías corruptos son necesarios para terminar de “manchar” a la Policía Boliviana? ¿O es que la institución verde olivo está estructuralmente descompuesta y, más bien, se nutre de “malos elementos”? 2. Volteos, encubrimientos, sobornos, estafas, coimas, fugas y otras conocidas prácticas son parte del modus operandi asociado a la Policía. 3. Ni hablemos de los motines: ora para blindarse y perforar su régimen disciplinario, ora por la ambición de beneficios a cuenta de un gobierno de facto. 4. Cierto que hay buenos policías, que ejercen sus funciones con integridad. Pero el protagonismo en la canasta, como ocurre con fiscales y jueces, lo tienen las manzanas podridas. 5. El reciente volteo de un millón de dólares, por mano de tres policías, parece la regla que confirma las excepciones. 6. ¿Qué hacer con la institución del (des)orden y su misión constitucional de defensa de la sociedad y conservación del orden público? Sucesivos intentos de reforma, anunciados con convicción, empiedran el camino. 7. Bien por los ejercicios para poner en forma a los policías gorditos. Pero el problema no es de peso, sino de metástasis.

José Luis Exeni Rodríguez es politólogo.

QOSHE - Mandatos de papel - José Luis Exeni Rodríguez
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Mandatos de papel

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21.01.2024

El pasado 17 de octubre, a dos décadas de la guerra del gas/masacre en El Alto, se realizó un cabildo convocado por la dirigencia arcista del Pacto de Unidad. Era la respuesta al congreso del MAS-IPSP, de la facción evista, celebrado días antes en Lauca Ñ. Había que lograr un empate en la precoz disputa interna por la candidatura presidencial 2025. El cabildo concluyó con un manifiesto y 19 mandatos entregados con gran ruido y júbilo al presidente Arce.

Transcurridos tres meses del “cabildo del pueblo”, ¿cómo van los mandatos que, en el papel, en los discursos, debían iniciar “la reconstrucción del proceso de cambio”? De los 19 puntos, siete eran solo declarativos o exigencias de coyuntura. Los otros 12, en cambio, implicaban acciones y, en su caso, resultados. “Vamos a hacer cumplirlo”, prometió Lucho tras recibir el documento. A la fecha, el saldo general es de incumplimiento o, peor, olvido.

Entre los mandatos había uno estratégico y otro........

© La Razón


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