Acuerdos institucionales como el de Doñana le ponen a uno los dientes largos y una mala leche revuelta con bilis. 1.400 millones de euros en total, 100.000 euros por hectárea por no producir, dejar de regar y reconvertir las parcelas para uso y disfrute de los bichos. Un acuerdo que busca frenar el deterioro de la biodiversidad y recuperar el parque. Una decisión que diluye el enfrentamiento entre Junta de Andalucía y Gobierno y que supone que "todos ganamos y nadie pierde". Mentira, pero hoy ese tema no toca.

El acuerdo sobre Doñana le pone a uno los dientes largos porque comparas y te das cuenta de la indefensión en la que vivimos en esta tierra. Doñana, nadie lo duda, es un paraíso terrenal, pero espacios naturales como las Lagunas de Villafáfila, la Sierra de la Culebra, el Lago de Sanabria o los Arribes del Duero son el cielo para muchas especies emblemáticas y el colmo de la variedad de paisajes en un espacio reducido. Nadie puede dar más en menos.

Solo dos datos. Aquí, en Zamora, tenemos la mayor colonia de avutardas del mundo, cerca de 7.000 ejemplares (en Tierra de Campos, Tierra del Pan y Tierra del Vino) y la mayor densidad de lobos de Europa (Sierra de la Culebra y alrededores). ¿Quién valora estos dos datos que en otro sitio serían cabecera de eslóganes y riqueza turística de la que viviría mucha gente? Nadie. Ni nosotros. Ni la Junta de Castilla y León, ni el Gobierno de España. Na-die.

Resulta que se quema la Sierra de la Culebra y Junta y Gobierno se ponen a discutir sobre quién tiene la culpa, como si el fuego tuviera color. No hay un plan de recuperación serio, no hay hoja de ruta, no hay interés por devolver la dignidad forestal, la rica biodiversidad que tuvo, a ese espacio. No hay dinero. Para Doñana, sí, que es un parque muy mediático, para la Sierra de la Culebra, no, que allí solo viven garrulos. Qué asco.

La política se ha convertido en el arte (o el desastre) de gestionar el día a día. Los partidos son empresas administradoras de un presupuesto lleno de espitas por donde se va la justicia y la igualdad. Solo se atiende al amigo o al que protesta a voces, y los zamoranos somos muy nuestros, amigos solo de nosotros, y de protestar, lo justo, que nacemos sin alas y tenemos un miedo cerval a levantar la cabeza.

Recuerdo una de las primeras intervenciones de Teresa Ribera, ministra de la cosa, la que va a llenar nuestra provincia de chatarra y vaciarla de humanos, que dijo en Zamora que el BOE no se puede utilizar para luchar contra la despoblación. ¿Aquí o allí? ¿En Doñana, Cataluña o el País Vasco? Flotan como cuchillos de pompas afiladas gotas de agua sobre esta Zamora que se muere.

QOSHE - La mala leche de Doñana - Celedonio Pérez
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La mala leche de Doñana

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29.11.2023

Acuerdos institucionales como el de Doñana le ponen a uno los dientes largos y una mala leche revuelta con bilis. 1.400 millones de euros en total, 100.000 euros por hectárea por no producir, dejar de regar y reconvertir las parcelas para uso y disfrute de los bichos. Un acuerdo que busca frenar el deterioro de la biodiversidad y recuperar el parque. Una decisión que diluye el enfrentamiento entre Junta de Andalucía y Gobierno y que supone que "todos ganamos y nadie pierde". Mentira, pero hoy ese tema no toca.

El acuerdo sobre Doñana le pone a uno los dientes largos porque comparas y te das cuenta de la indefensión en la que vivimos en esta tierra. Doñana, nadie lo........

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