"Solo hay decepción si hay esperanza."
C.A Baquerín

Estoy agotada de tener razón, lo juro. O más bien agotada de que se apunten al carro ahora los que no dieron la cara cuando era preciso: expulsiones de Marlaska en Ceuta, retirada del acta al podemita de las rastas, intento de repetición del juicio de Bateragune a Otegi, eso en lo más reciente, pero Altsasu, procés y tantas otras. En el fondo, me cabe la alegría de que en todos estos casos en alguna instancia se ha impuesto la cordura, lo que significa que en otros muchos tribunales imperó algo que no lo era, ni tampoco era justicia.

También he argumentado en esta columna reiteradamente como se está fabricando un delito inexistente de terrorismo en la Audiencia Nacional. No hace falta ser muy listo para comprenderlo. Si Europa no va a permitir amnistiar el terrorismo, convirtámoslo en terrorismo para parar la amnistía. Si nos sabe malo que Puigdemont se vaya de rositas, convirtámoslo en imputado por terrorismo. Es estúpido que los políticos y los ministros salgan a ciscarse en los jueces o en un juez con la brocha gorda. Miren, no, hay suficiente prueba de la inconsistencia de las actuaciones como para no ser preciso disparar a todo lo que se mueva. El terrorismo de Tsunami que nadie vio. El atentado terrorista, ese con graves daños y resultado de muerte por infarto, que se convocó por redes, lo dice García-Castellón en su auto; siendo esta una característica definitoria de los atentados: que se llama a cometerlos públicamente.

Sucede que teníamos tanto miedo a los yihadistas que fuimos estirando y estirando la definición de los delitos de terrorismo. Siempre habíamos tenido claro cuándo nos la veíamos con terroristas y qué era terrorismo, hasta que llegaron los títeres, Altsasu, el aeropuerto de Barcelona y ¡ah! conducir despacito para bloquear Barajas. Tengan en cuenta que ya no hace falta que exista una organización detrás, que uno se autoradicaliza mirando páginas web y que cualquier delito grave "contra la vida, la integridad física o moral, la libertad e indemnidad sexuales, el patrimonio, los recursos naturales o el medio ambiente, la salud pública, de riesgo catastrófico, incendio, contra la Corona, de atentado y tenencia de armas, municiones o explosivos" puede ser terrorismo si tiene finalidades —elemento subjetivo del tipo— también amplísimas. Así que digamos que hay algunos togados, que nunca hubieran tratado el terrorismo cuando corrían riesgo, que ahora que han llegado a la AN lo esparcen con prodigalidad.

Es más que obvio que la jugada de García-Castellón y su huída de un posible rechazo de sus superiores tirando a puerta del Supremo, no es sino una estrategia para reventar la ley de amnistía, al menos en lo referido a Puigdemont, Alay, Rovira y los implicados en Tsunami

Aun así, lo del atentado de Tsunami se hace bastante bola. Me llega la onda de que las mentes preclaras del Tribunal Supremo, que tiene que decidir si se quedan con el paquete que le manda García-Castellón, tampoco ven lo del atentado muy asumible, así que se decantan por la kale borroka, una figura de terrorismo de baja intensidad, que ahora habría que llamar lluita al carrer o algo así. ¿Eso sería terrorismo? Sería terrorismo. ¿Eso permitiría preguntar en una prejudicial si se puede amnistiar el terrorismo? Puede ser lo que se pretende. Y lo digo, aunque estoy harta de tener razón y de que los juristas que lo saben se callen, porque es más que obvio que la jugada de García-Castellón y su huída de un posible rechazo de sus superiores tirando a puerta del Supremo, no es sino una estrategia para reventar la ley de amnistía, al menos en lo referido a Puigdemont, Alay, Rovira y los implicados en Tsunami. Lo de los CDR ya lo tienen maqueado y lo dan por descontado.

Así que García-Castellón despeja auto a las Salesas y la sala segunda pide informe a la Fiscalía del Supremo sobre si acepta o no quedarse con el terrorismo de Puigdemont. Recordemos que la Fiscalía de la AN no ha tragado con ello y ha pedido reiteradamente que se envíe el tema a Catalunya como desórdenes públicos graves. Eso les puede hacer pensar, al ser la Fiscalía una sola voz, que a la sala segunda le volverán a informar lo mismo. No apostaría yo un chavo, y me gustaría equivocarme, pero si estos comentarios son más que comentarios, no diría yo que no nos obsequien los fiscales del Supremo con un informe que hable de esa lucha callejera terrorista. No es la primera vez, ya lo hicieron en 2017 con unos altercados en Pamplona y también con la pelea de Altsasu. Cuando informen los cuatro indómitos fiscales supremos veremos a ver si existe o no unicidad del ministerio fiscal.

Y ahora viene lo de las enmiendas, que pretenden sortear esto sin meterse en el berenjenal de la inclusión del terrorismo sin sentencia firme que muchos veían muy fácil de tumbar. Ahora, según lo pactado, el terrorismo queda excluido del perímetro de la amnistía “siempre que, de forma manifiesta y con intención directa, haya causado violaciones graves de derechos humanos”, en particular, si afectan al derecho a la vida o se han producido torturas". Así que, según los proponentes, aunque el Tribunal Supremo se empeñara en la lucha terrorista al carrer y considerando que como terrorismo quedarían excluidos, después tendrían que analizar una segunda condición, si esos hechos han producido una violación GRAVE de los derechos humanos y esa gravedad debe ser interpretada en función de las directivas europeas. Con todo y con eso, hay quien ve que todavía algunos jueces pueden ponerse creativos. Esta solución en las enmiendas ha sido aceptada por ERC, PSOE y Junts, pero puede que aún no sea la definitiva. Aún hay alguna opción de transacional que los juntaires barajan hablar con ERC y otra diferente con el PNV, y aún queda una semana más para negociar.

Estoy agotada de llevar razón y espero que todo esto no sean sino rumores madrileños y que el informe fiscal sea igual al de la Audiencia Nacional y que Tsunami acabe de una vez en Barcelona y entre en la amnistía. Pero como ya han visto que muchas veces acierto, no se olviden de lo de la kale borroka catalana, que cosas más raras se han visto.

QOSHE - Llega la 'lluita al carrer' - Elisa Beni
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Llega la 'lluita al carrer'

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24.01.2024

"Solo hay decepción si hay esperanza."
C.A Baquerín

Estoy agotada de tener razón, lo juro. O más bien agotada de que se apunten al carro ahora los que no dieron la cara cuando era preciso: expulsiones de Marlaska en Ceuta, retirada del acta al podemita de las rastas, intento de repetición del juicio de Bateragune a Otegi, eso en lo más reciente, pero Altsasu, procés y tantas otras. En el fondo, me cabe la alegría de que en todos estos casos en alguna instancia se ha impuesto la cordura, lo que significa que en otros muchos tribunales imperó algo que no lo era, ni tampoco era justicia.

También he argumentado en esta columna reiteradamente como se está fabricando un delito inexistente de terrorismo en la Audiencia Nacional. No hace falta ser muy listo para comprenderlo. Si Europa no va a permitir amnistiar el terrorismo, convirtámoslo en terrorismo para parar la amnistía. Si nos sabe malo que Puigdemont se vaya de rositas, convirtámoslo en imputado por terrorismo. Es estúpido que los políticos y los ministros salgan a ciscarse en los jueces o en un juez con la brocha gorda. Miren, no, hay suficiente prueba de la inconsistencia de las actuaciones como para no ser preciso disparar a todo lo que se mueva. El terrorismo de Tsunami que nadie vio. El atentado terrorista, ese con graves daños y resultado de muerte por infarto, que se convocó por redes, lo dice García-Castellón en su auto; siendo esta una característica definitoria de los atentados: que se llama a cometerlos públicamente.

Sucede que teníamos tanto........

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