Los gatos, que nos han acompañado desde la antigüedad, son sagrados en El Cairo, Borneo y Estambul.

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Aunque en América los indígenas ya habían domesticado al gato montés, los españoles acostumbraban a transportar en sus barcos decenas de felinos, con el único fin de desterrar a las ratas.

Los gatos arrasaron con las ratas que se escondían en las bodegas de los navíos, pero no pudieron con las ratas bípedas, de dos patas, que desde la Colonia se implantaron en tierra firme hasta el día de hoy.

La noticia maravillosa que hoy les traigo es que Santiago de Cali, la ciudad alegre y tropical de Colombia, se ha convertido en el albergue de los gatos.

A raíz del cumpleaños de........

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