Petro y su realismo mágico de Estado
El realismo mágico literario es ampliamente conocido en nuestro país. Se caracteriza por su afán de mostrar lo irreal y extraño, como si fuera algo cotidiano y común, con el uso de hechos fantásticos, mágicos y nunca explicados, al igual que lo ilógico de las situaciones o argumentos, que son percibidas como normales. Nada más emocionante que leer una novela con el uso de este género, que emociona y pone a volar la imaginación.
Pues bien, el ‘gobierno del cambio’ terminó convirtiendo el realismo mágico en política de Estado. El problema es que es divertido y pintoresco en las novelas, pero empobrecedor y cínico como política de Estado. Lo irracional e ilógico se vuelve normal y cotidiano. Lo que sirve técnicamente y a largo plazo se descarta por la coyuntura y las mágicas y........
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