Tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos
La divertida sentencia de Nemesio García Naranjo (erróneamente atribuida a Porfirio Díaz), “¡Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos!” en este siglo está lejos de tener vigencia. Dada su cercanía con el coloso del norte, México no solo es un país próspero, sino que cada día se hace más rico. Su presunta lejanía con Dios, por contra, no parece afectarlo. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), con una tasa de desempleo del 2,9 % de la población económicamente activa, en el sector formal se podría decir que no hay desempleo. En México existe esa maravillosa válvula de escape que es el río Grande: el que no consigue empleo, viaja al norte y cruza el río. ‘Los mojados’, como afectuosamente los llaman, una vez en Estado........
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