En la búsqueda de las causas de algunas muertes ocurridas bajo condiciones de estrés profundo que habían sido reportadas en los años 40 del siglo pasado, el biólogo Curt Ritcher puso varios ratones de laboratorio en sendos cubos con agua. Nadaron por unos quince minutos antes de ahogarse. Repitió el experimento, pero esta vez rescató los ratones antes de que murieran y los cuidó. Luego los volvió a meter en el agua y entonces nadaron por más de sesenta horas antes de desfallecer. Hoy ese experimento no se podría hacer por razones legales y éticas, pero en su momento sirvió para probar que los organismos con algún grado de conciencia se rinden fácilmente ante la ausencia de esperanza, pero pueden extremar su resistencia ante la menor........

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