Íñigo Errejón esta en boca de todos, pero como lo de hacer leña del árbol caído no va conmigo, y la verdad veo a suficientes leñadores hacha en mano, y él en cierto modo parece admitir su culpabilidad, yo voy a ir por otro lado.

Errejón ha dicho algo que me parece muy interesante, que el personaje se comió a la persona, y que la política institucional te aleja de la gente y te hace perder la empatía. En esa parte me lo creo.

Siempre he dicho que SUMAR es una mentira y una herramienta del sistema donde cada uno hace un personaje.

Es un partido nacido de la decisión de un pequeño grupo apoyado por una parte del poder, que a la vez son quienes realmente mueven los hilos, donde una serie de personajes con egos inflados, facilidad de palabra, y poca o ninguna lealtad a la clase trabajadora interpretan un papel.

La incoherencia de los personajes no puede sorprenderme porque ya........

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