Moisés era Charlton Heston
Estados Unidos no quiere la guerra. Irán no quiere la guerra. Israel no quiere la guerra. Pero Netanhayu sí quiere la guerra. Su posición de huida hacia adelante, entre otras cosas, para salvar sus objetivos políticos y librarse de tres juicios que podrían condenarlo por corrupción, contempla aprovechar cualquier oportunidad de arrastrar al régimen iraní a una confrontación abierta que obligaría a Estados Unidos a participar en una guerra que no desea, a las puertas de las elecciones presidenciales. Además, es mediante guerras que el sionismo sigue ocupando territorios para incorporarlos al proyecto del Gran Israel. Todavía le falta provocar unas cuantas guerras.
Es significativo que en pleno siglo XXI un país teocrático que basa su legitimidad en la narración bíblica esté presionando a todas las potencias occidentales, obligándoles a tomar partido por un poder ultra religioso que dice gobernar por mandato divino. Al lado de ejemplos así la laicidad es un tema menor. El sionismo es un grupo judío con una cultura colonizadora y violenta que está decidiendo la suerte de la humanidad. No es ningún regalo a la demagogia. Armas nucleares y misión divina casan mal,........
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