Los fantasmas de Evo y muchos MAS
El 26 de abril de 2009, los bolivianos amanecimos con la noticia de un allanamiento a un céntrico hotel de cuatro estrellas de la ciudad de Santa Cruz, y con el anuncio de la muerte, decían en combate, de unos supuestos terroristas. Los sucesos habían tenido lugar en la madrugada, antes de las 5:00, y recién 12 horas después pudo entrar la Fiscalía a hacer su trabajo.
Este evento fue sin lugar a dudas un abuso de poder extremo, una ejecución extrajudicial sin ningún atenuante, pues los individuos que fueron asesinados estaban en sus camas de hotel, dormidos y solo se despertaron debido a la intervención, y tenía que haber indignado a moros y cristianos.
Un gobierno democrático no puede permitirse eso, no tiene ninguna importancia el hecho de que los individuos en cuestión estuvieran tramando el peor de los crímenes, simplemente ese no es el modo en que pueden proceder las fuerzas del orden, precisamente porque ante todo se debe presumir la inocencia de las personas hasta........
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