Para atrás, como el cangrejo
Solo porque lo dijo la Corte Constitucional, en Colombia no puede haber cadena perpetua para violadores y asesinos de menores. Es como si ese sanedrín tuviera la verdad revelada y sus fallos fueran infalibles. El pueblo siempre es superior a sus dirigentes y lo que el pueblo quiere es cadena perpetua o pena de muerte para estos criminales infames, para que cada tanto no se repitan las mismas tragedias, pero la aturdida institucionalidad no deja avanzar: el perdón que proclaman los de mentalidad progre, no es otra cosa que retroceder.
Lo mismo puede verse en el caso de la siembra de coca. En el Gobierno del inefable Santos, el diletante Alejandro Gaviria aseguró que asperjar con glifosato es cancerígeno y con ello acabó, por orden de las Farc, con la fumigación de cultivos ilícitos. A esta hora, Gaviria, Santos y otros por el estilo, siguen sin poder contestar por qué el glifosato es nocivo para fumigar cultivos ilícitos en las regiones más apartadas de los centros urbanos y, en cambio, es buena y permitida en........
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