Aldama contra Trasímaco. Derecho y Justicia
El dictadorzuelo de La Moncloa está débil. Negarlo sería una majadería. Lo real es lo real. No lo ocultemos con ideología. Engaño. Las declaraciones del imputado Aldama al juez son tan creíbles que lo han puesto en la calle. Hagámonos los ingenuos. Siempre es bueno para pensar. Estamos ante dos relatos enfrentados: el de Aldama contra Sánchez. Ojalá sea así. Sé muy bien que la denuncia de Aldama es creíble y la del otro filfa. Sabemos hace mucho tiempo, porque así lo hemos estudiado, investigado y razonado, que Sánchez no tiene legitimidad alguna para seguir en La Moncloa. Pero nadie pierda la referencia de dónde estamos y cómo podemos salir de aquí. No confundamos la ingenuidad con la infantil inocencia. Sospecho que nos tocará aguantar todavía mucho tiempo hasta que esto reviente por alguna parte. Nadie eluda su responsabilidad intelectual diciendo que tenemos el gobierno que nos merecemos, que malo es Sánchez pero peor es el populacho… Todo eso son abstracciones, generalidades, engaños para no abordar el debate trágico de España: la fuerza de la razón contra las "verdades" de hecho.
Mientras que la razón está de parte de Aldama, de un delincuente, el poder, el gran engaño, está en las manos de Sánchez. Verdades de razón contra "verdades" de hecho. El Derecho tiene la razón, pero, ay, la "Justicia" está todavía en poder de Sánchez, sencillamente, porque este, como el personaje de Platón, en el primer libro de La República, ha dicho "lo justo es lo que conviene o complace al más fuerte". Aldama contra Trasímaco. Las espadas están........
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