Julio Castellanos: Pecado y delito
El hecho concreto y doloroso de vivir en un país autoritario como Venezuela, en el que la función más importante que tienen los funcionarios públicos es perseguir y acallar a cualquiera que opine y piense libremente, tiene efectos innegables sobre la calidad del debate público. No solo debemos suponer que la ausencia de libre circulación de ideas y la atomización de las audiencias en medio de desiertos informativos provoca que los ciudadanos estén “perdidos” en relación a los acontecimientos y sean susceptibles a caer en las trampas de las noticias falsas y la manipulación de la propaganda gubernamental, es que también, producto de semejante contexto represivo, la razón y la meditación es sustituida por los prejuicios en la conducta de mucha gente.
Quizá sea un fenómeno comprensible si se estudia de alguna manera, ante la falta de información fidedigna, confiable, soportada en datos y evidencias, la ignorancia florece, pierde el........
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