Muchos colombianos que hoy no acompañan al gobierno Petro —y muchos que llegaron con él y terminaron decepcionados— observan alarmados los resultados de la última encuesta, en la que el candidato del Pacto Histórico aparece liderando la intención de voto. La preocupación no se explica solo por los números, sino por el temor de que la dispersión de las demás candidaturas termine facilitando una nueva victoria de la izquierda. Ante ese escenario, varios miran hacia Chile como espejo, buscando tranquilidad.

En Chile, la oposición no se apresuró a ungir un candidato único. Permitió que coexistieran varias aspiraciones, que se midieran fuerzas y que el tiempo decantara liderazgos. Como bien........

© La Nación