Honor
El honor es patrimonio del alma y el alma solo es de Dios, eso decía el alcalde de Zalamea en la conocida pieza teatral de Calderón de la Barca. No es el honor una cuestión banal, pero estos no parecen tiempos para su consideración, al contrario, podríamos decir que en estos tiempos es con gran probabilidad la última cosa en la que se piensa y probablemente la sesión de investidura de hoy en el Parlament de Catalunya es el epítome en la constatación de una evidencia. Aunque todo empezó antes.
Honor habría sido que, una vez declarada la independencia en octubre de 2017, aquellos que decidieron que ese era el camino se mantuvieran en él hasta el final. Pero no fue así, y de la decepción de unos parroquianos que tuvieron fe en las palabras de sus dirigentes se han derivado después los altos niveles de abstención en los que, sin duda, no ha sido un elemento favorable la clara división........
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