El muro
En Jerusalén hay una pared donde los judíos van a llorar la pena de no poder acceder a la actual explanada de las mezquitas, el lugar más cercano al Sancta Sanctorum del Templo que los romanos les destruyeron. Es probablemente el muro más famoso del mundo y en estos tiempos de convulsión en Gaza aún cobra mayor significado en ese enfrentamiento ancestral entre dos de las tres religiones del Libro. Pero no es el único muro.
En la España presente, (in)vertebrada por ancestrales cainismos, nada ha sido igual desde aquel negro 11 de marzo en que los errores, las mentiras y las malas intenciones se hicieron carne en dos (no uno) partidos políticos. El capitán Lozano, abuelo del presidente Rodríguez Zapatero, empezó a coger velocidad, cogido de su mano y muchos años después de muerto, hacia un horizonte que la recientemente fallecida periodista Victoria Prego habría contemplado con consternación. Los muertos no........
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