Bogotá: del pesimismo al optimismo
Luego de los discursos de posesión, los alcaldes entraron en materia. Ahora se viene un capítulo muy importante para Bogotá, como para todos los municipios del país, que es alinear las promesas de gobierno, coreadas como candidatos, con la formulación del Plan de Desarrollo y su aprobación por parte de los nuevos concejos, en los primeros cinco meses del año.
Hay que recordar que la Constitución cobija, para estos cargos de elección popular, el voto programático, a diferencia del caso presidencial. Es decir, que el programa de gobierno que presentaron al momento de inscribirse como candidatos debe coincidir con el plan de desarrollo para el cuatrienio, lo cual los obliga a cumplir con sus propuestas de campaña. Su inobservancia puede dar lugar a la revocatoria del mandato, como facultad de control que ostentan sus electores.
Bogotá Cómo Vamos comenzó el año insistiendo........
© El Nuevo Siglo Bogotá
visit website