Una deuda histórica
En primer lugar, es crucial reconocer que la desnutrición crónica sigue siendo una de las principales causas de mortalidad infantil en la región. Los informes más recientes muestran que, a pesar de los esfuerzos puntuales, las tasas de desnutrición infantil continúan siendo alarmantes. Según datos del Instituto Nacional de Salud, más del 50% de los niños Wayuu menores de cinco años presentan algún grado de desnutrición, lo que no solo afecta su crecimiento físico, sino también su desarrollo cognitivo. El Estado tiene la obligación de actuar con políticas a largo plazo que garanticen la seguridad alimentaria de estas comunidades.
Desde mi punto de vista, la solución no puede reducirse únicamente a la entrega ocasional de alimentos. Si bien esto es necesario en situaciones de emergencia, la verdadera transformación debe provenir de la implementación de programas sostenibles de producción agrícola en las comunidades........
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