Del fraude solidario a la jornada laboral
Mientras decenas de miles de voluntarios de todos los rincones de España y con ellos otros tantos militares, policías, bomberos y sanitarios se afanaban en limpiar las calles, buscar desaparecidos, repartir artículos de limpieza, enseres, agua y alimentos y en atender y auxiliar a las víctimas de la DANA. Mientras otros muchos ciudadanos particulares y empresarios donaban cantidades de dinero, maquinaria y artículos de necesidad, la solidaridad de los autodenominados sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, se concretaba en convocar un paro de diez minutos en todos los centros de trabajo públicos y privados del país.
Ni uno sólo de sus dirigentes se ha desplazado a las zonas afectadas para arrimar el hombro, que eso de trabajar no está en su ADN y les repele. Tampoco se conoce que hayan destinado cantidad alguna de dinero, que el marisco está muy caro últimamente. No ellos a lo suyo a convocar paros y a secundar a la ministra de Trabajo, Yoli la de los cohetes, para imponer manu militari una reducción de jornada,........
© El Economista
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