¿Talante democrático del Gobierno?
Por Juan Pablo Liévano
Los venezolanos sellaron su destino. Aburridos con la política tradicional y la enquistada corrupción, decidieron elegir a Hugo Chávez como presidente en 1999. Muchos ingenuos pensaron que era la salvación de la democracia venezolana, a pesar de que en 1992 Chávez había intentado un golpe de estado. Al poco tiempo del intento de golpe, el presidente Caldera, casi un octogenario, decidió concederle un sobreseimiento, por no decir que un perdón al teniente coronel; un claro error histórico del que aún padecemos sus consecuencias. Chávez empieza de manera controlada, como buen futuro dictador, pero su piel de oveja mansa empezó a caerse, hasta dejar ver la piel de lobo estepario o depredador autócrata y comunista. Su empuñadura en el poder era tan fuerte y aberrante que el régimen logró perpetuarse........
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