Salud Mental Colectiva Decolonial y la obra de Francisco Herrera Luque
Considero que la salud es una sola, que el paradigma cartesiano con su “cogito, ergo sum”, “pienso, luego existo”, nos fragmentó en salud corporal y salud mental, desde mi concepción categorial teórica, la salud es el encuentro entre las tres más grandes subjetividades de la humanidad: la Subjetividad del Ser, la Intersubjetividad del Amar y la Intersubjetividad del Tener-Estar, lo que nos permite comprender e interpretar que el Ser, es un sujeto singular que nace, reside y convive en una comunidad política de voluntad de vida, según Enrique Dussel (2010), en la que se interactúa, se relaciona socio comunitariamente y establece vínculos afectivos con un colectivo intersubjetivo que es el Amar, que crea también interrelaciones con la naturaleza, la “pacha mama” de nuestros pueblos originarios, con otros seres vivos, vegetales, animales y la misma naturaleza, en territorios que denominamos la intersubjetividad del Tener-Estar, somos seres humanos comunitarios y territoriales, a diferencia de otros animales de la escala zoológica, que son gregarios; convivimos en espacios geográficos, que como resultado de nuestra presencia en los mismo, los hemos modificado convirtiéndolos en territorios, lo que era una naturaleza espacial y geográfica no humana, de ahí que, no hay territorio sin pueblo como sujeto colectivo e histórico cultural.
De lo anterior se desprende, que producto del encuentro, interacciones, relaciones sociales y vínculos afectivos, en el devenir de la vida, se crean situaciones de bienestar caracterizadas, por seres humanos, como colectivos integrados social y dignamente a la sociedad a la que pertenecen, gozan de una riqueza en calidad y cantidad de interacciones, relaciones sociales y vínculos afectivos que les generan felicidad y conviven en territorios con cartografías sociales de igualdad, justicia e inclusión que le generan satisfacción, es lo que denomino Salud Mental Colectiva plena, bien-estar colectivo, la Suprema Felicidad deseada y manifestada por nuestro Libertador Simón Bolívar en su discurso del Congreso de Angostura del 15 de febrero de 1819.
Por el contrario, si como seres humanos singulares, vivimos en una sociedad que no nos brinda la posibilidad de desarrollarnos y vivir con dignidad, progresivamente nos aislamos, nuestras interacciones, relaciones sociales y vínculos afectivos son insuficientes y a veces pueden ser conflictivos, además nos corresponde vivir en territorios con insuficiente y deficientes servicios públicos, característicos de cartografías sociales de desigualdad, injusticia y exclusión me convierto en un resentido social, infeliz e insatisfecho, vivo con malestar personal y colectivo; si este malestar colectivo, se prolonga en el tiempo, es decir, se hace crónico indudablemente que conduce a enfermedades orgánicas y trastornos mentales, los síndromes clínicos que estudia la Psiquiatría, algunos de los cuales, nos pueden conducir a la muerte prematura.
Desde 1492 como como pueblos originarios de Abya Yala, éramos Civilizaciones Inca, Maya, Azteca y Guaraní-Caribe, con nada que envidiarle a otras civilizaciones, fuimos Encubiertos, no “descubiertos” (Dussel, 1994), por el Conquistador español quien inició una conquista y colonización violenta, que se mantienen hasta nuestros días, mediante la Colonialidad como patrón ideológico (falsa conciencia) de dominación mediante el poder político, imposición mediante saberes euro-anglo-céntricos y de la alienación ideológica de la subjetividad, no recociéndonos como seres humanos, subalternizándonos e inferiorizándonos, mediante genocidios, etnicidios, epistemicidios, memoricidios, además de considerarnos seres no humanos, por no tener “alma” según el conquistador José Ginés de Sepúlveda, quien sostuvo las Controversias de Valladolid en 1550, con Fray Bartolomé de las Casas, evangelizador, es decir, un conquistador humanizado de almas para el cristianismo, quien rebatía a Ginés de Sepúlveda su concepción equivocada sobre nuestra condición de animalidad por no tener “alma”, para con ello, justificar todos los genocidios, etnocidios, epistemicidios e “icidios” que se nos ocurran, por los conquistadores; actualizado hoy, por si queda alguna duda, por el sionismo mundial liderados por EE. UU e Israel, con el genocidio y destrucción total del pueblo Palestino.
Hasta acá a grandes rasgos, he esbozado mi concepción categorial de la Salud Mental Colectiva, lo Colonial/Decolonial, lo referiremos más adelante, ahora quiero referirme a lo........
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