Perdón y gracias
La gratitud es un deber que debe pagarse, pero no un derecho que debe exigirse.
Jean-Jacques Rousseau
Esther Perel, famosa terapeuta de parejas, afirma que si alguien que fue infiel no es capaz de pedir perdón por el daño causado y minimiza el hecho o desvía su responsabilidad hablando de lo mal que estaba la relación, no es alguien con quien valga la pena seguir adelante.
Abundan las investigaciones sobre el impacto positivo en la salud mental de quienes hacen de la gratitud un hábito. La gratitud es reconocer lo bueno que hay fuera de nosotros: las personas, la naturaleza, la belleza, todo lo que sale bien. Además de ser capaces de verlo, hay que expresarlo.
Existen dos palabras que podrían hacer nuestra vida mucho más amable si las dijéramos con más frecuencia: perdón y gracias. La primera es........
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