(Expansión) - Dentro de una década es probable que la huella global de la cadena de valor de la tecnología sea muy diferente; las empresas deberían evaluar sus opciones desde hoy.

Los choques, impactos y cambios de los últimos años han hecho que las empresas tecnológicas se den cuenta de los riesgos de las políticas restrictivas y los controles de exportación. La mayoría está avanzando para generar resiliencia en sus cadenas de suministro, principalmente expandiendo su huella geográfica y creando más flexibilidad dentro de su talento.

Invertir en resiliencia es costoso y podría llevar décadas. Pero la buena noticia es que ésta no significa 100% de aversión al riesgo, lo cual sería ineficiente.

La resiliencia práctica significa diversificar los aspectos más críticos de su negocio mientras se acerca a los mercados finales.

El impulso inicial de estar más cerca de los mercados finales, diversificarse geográficamente y responder a las presiones de gobiernos locales y reguladores llevó a las empresas a desenredar sus cadenas de suministro. Ahora están ampliando esos........

© Expansión