La ciencia hay que pagarla
Entre 2007 y 2024, la Unión Europea ha destinado 155 mil millones de euros a proyectos de I D. El 40% de dichos recursos han sido para financiar grupos de investigadores de las universidades, y algo más de la cuarta parte tanto para centros tecnológicos e institutos públicos de investigación (27%) como para empresas (26%). El resto, 7%, sobre todo, se ha orientado a investigadores de las administraciones públicas.
La ciencia hay que pagarla
Los investigadores de España han captado el 8% de dichos recursos, y en este caso, la participación de las empresas (43%) y de los centros tecnológicos (37%) es mayor, a costa de los recursos captados por las universidades (26%). Estas diferencias en el tipo de organismo que recibe la financiación no supone un modelo diferente: el sector público capta la mayor parte de la financiación, y las empresas tienen un peso importante pero no decisivo.
Otro caso es Euskadi; con un 14% de los recursos captados por España, la mayor parte se ha dirigido a las empresas (59%), un 28% a los centros tecnológicos y solamente el 9% a las universidades. Una participación tan escasa de las universidades vascas no parece propio del modelo europeo de investigación, donde hay una clara asignación de la investigación básica, a los centros de investigación públicos –en su mayor parte integrados en las universidades– y una colaboración institucional de estos centros con las empresas para las actividades de desarrollo e innovación. Tampoco se parece al modelo norteamericano, caracterizado por una implicación empresarial en actividades de investigación básica, que se desarrolla en laboratorios propios y en coordinación con las universidades públicas y privadas y los centros tecnológicos públicos. Más bien se parece al modelo japonés, donde la universidad cumple casi exclusivamente funciones de formación, mientras que la investigación tanto básica como aplicada se........
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