Cuba pierde la esperanza

El domingo pasado se produjeron una serie de manifestaciones en varias ciudades de Cuba. Eran pequeñas concentraciones de unos cientos de personas que protestaban por la crisis económica, los apagones y la falta de comida. Algunos se atrevieron incluso a entonar en alto la canción Patria y Vida que surgió hace menos de tres años y que constituye toda una declaración política dentro de la isla. En cualquier otro lugar del mundo una concentración formada por dos centenares de personas no supone noticia alguna, pero sí en Cuba. Allí manifestarse es extremadamente peligroso ya que la policía actúa de inmediato y reprime sin miramientos a quienes estén concentrados. En julio de 2021 hubo manifestaciones mucho más numerosas que duraron, además, varios días y que se saldaron con más de mil detenciones. Muchos de los manifestantes de aquel brote de dignidad dieron con sus huesos en la cárcel y hoy siguen en ella.

Precisamente por eso, porque las protestas son muy escasas, en cuanto salen cuatro personas a la calle y se quejan el régimen monta un gabinete de crisis. El domingo por la tarde, tan pronto como estos grupos ya reunieron en lugares muy visibles de Santiago o de La Habana, Etecsa, la empresa estatal de telecomunicaciones de Cuba restringió el acceso a internet. Esta primera medida la aprendieron de las manifestaciones de 2021. Muchos cubanos tienen un teléfono móvil con acceso a la red. Terminales por lo general sencillos pero que les permiten conectarse a redes sociales a través de VPN. Oficialmente no se pueden conectar a Whatsapp o a Telegram (esta última fue prohibida a raíz de las protestas de 2021), pero se las apañan para hacerlo. Lo mismo hacen con Twitter, Facebook o Instagram.

Esa es la razón por la que no tardaron en verse vídeos en los que aparecían manifestantes en las calles de Santiago, La Habana o Bayamo protestando por los cortes de luz y la escasez de alimentos. Eso es peligroso ya que otros lo ven y se animan a unirse. De eso tomaron nota rápidamente en el Gobierno y cortaron en el acto el acceso a internet móvil en ciertas áreas del país, justo en las que había manifestaciones. El corte se prolongó durante unas cinco horas y dejó esas zonas desconectadas. La mayoría de los cubanos depende de la telefonía móvil para acceder a las redes sociales ya que pocos tienen acceso a banda ancha. En tanto que no existe prensa libre ni posibilidad de convocar nada al margen del Gobierno, o se enteran por el móvil o no se enteran.

En Cuba están terminantemente prohibidas todas las........

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