En los años 1600: El costo del tiempo detenido
Uno de los síntomas más claros de este anacronismo es el apego a jerarquías verticales y modelos autoritarios de gestión. En distintas organizaciones en el momento actual, quienes fungen como CEO actúan como soberanos que toman decisiones unilaterales mientras sus equipos esperan orientaciones, replicando la lógica de las cortes reales del siglo XVII.
En un mundo donde los avances tecnológicos y las transformaciones sociales han redibujado las reglas del juego, sorprende que muchas organizaciones sigan gestionándose con modelos más apropiados para la Europa del Renacimiento que para el siglo XXI. Como si fueran castillos feudales, estas instituciones perpetúan estructuras jerárquicas rígidas, decisiones centralizadas y poca apertura al cambio, ignorando que la velocidad y la flexibilidad son esenciales en la era moderna. Gary........
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