Aa
Aa
Aa
-
A
+
Las apariencias engañan
Esperé un mes: el tiempo que mediaba entre las entregas de alimentos normados. Cuando el dependiente despachaba los frijoles negros indagué por qué —con él solamente— daba para un potaje y cuando lo hacía la otra bodeguera alcanzaba además del potaje, para un congrí. Su respuesta, una sonrisa.
Relato la anécdota porque algunas personas comentan: “Tú no tienes problemas, eres sola”,como si tuviera una asignación mayor o se multiplicara lo asignado por la canasta básica, al repartir en una sola persona. Respondo que sí, además de cubrir sola los gastos de todo e incluyo lo que se rompe o deteriora por el tiempo, cambios de........
© Tribuna de La Habana
visit website