Nunca hay que ocultar las cicatrices. A veces muestran nuestras mayores fortalezas. En ocasiones denotan fragilidad y la necesidad de cambiar…
El movimiento deportivo cubano tiene la piel en carne viva.
Los Juegos Olímpicos de París 2024 volvieron a evidenciar que la herida sangra más. No cumplir los objetivos previstos demostró que, a pesar de que se lanzaron luego de juiciosos análisis, y estos no son una ciencia exacta, se debió evitar acuñar un pronóstico tan optimista, que lastimosamente pudo desdibujar un poco nuestra actuación.
Hace un buen tiempo, el deporte en Cuba es un reflejo de la sociedad que habitamos. Por favor, le recuerdo, antes de que las venas del cuello se le inflamen, y dispare adjetivos hirientes, que siempre reverenciaré al atleta cubano.
Es uno de........