“Entonces, ¿qué es lo que define a Occidente? … Los límites de Occidente son tremendamente vagos; sólo queda clara, y es inmutable, la función de interdicto ideológico de una categoría llamada a condenar y a excluir de la comunión con la civilización a aquellos que de vez en cuando son considerados como extranjeros y hostiles a Occidente. Tal es la suerte que han corrido en primer lugar, los pueblos coloniales: su sometimiento, o al menos su confinamiento a un papel subalterno, es un elemento constitutivo de la identidad occidental”.
Del libro titulado “El lenguaje del Imperio. Léxico de la ideología americana”. Autor: Doménico Losurdo. Traducción de Alejandro García Mayo. Editorial Escolar y Mayo.
1. Los hechos crean las ideas, la experiencia produce el lenguaje. Lucharon y hoy tenemos pulso, ritmo en la conciencia. El currículum se elabora con lo realizado. La montaña aplasta a la clase trabajadora, y la acción histórica nueva, el avance justiciero, hizo la canción que es internacional. La montaña sobre la canción. La canción sobre la montaña. La canción nos lo explica y la admiramos. La canción que esperanza el alma humana en América Latina la hizo Fidel y la hace Canel, la hace Daniel y la hace Rosario, la hizo Chávez y la hace Nicolás: la hacen los tres. Son cuerpos repletos de Historia, son timbre, ráfaga luciente, son manos al volante, y aun queda mucho por decir, aunque poniendo la mente en ellos los siento como una verificación acelerada y absoluta. Tres luces que el enemigo contempla desolado, no ve el mapa, se ha perdido y va perdido al final mientras zarpea del fondeadero y … se va hundiendo conforme resuella.
Regresar a las raíces, el imperio a su base doctrinal: “el destino manifiesto” supremacista, de división, de confrontación.
Cuba, Nicaragua, Venezuela: pueblo soberano, pueblo soberano, pueblo soberano, principio de identidad, de unidad nacional, y se llena de continente la identidad y la unidad nacional.
El irracionalismo y el desprecio de la razón en las más variadas formas, es lo falso, es la infusión de desconfianza, división, desprecio, chupa sangre de los pueblos, … y crece la montaña sobre la canción. Los genocidas se echan encima, los irracionalistas, los negadores de la vida, de la justicia obrera, los que azuzan a los mercenarios de Miami, a los contras, a los comanditos, … para que claven la bala, el puñal, el colmillo venenoso al conjunto común, fuego a los hospitales, a los colegios, a los mercados populares, a las viviendas sociales, a los ayuntamientos, al colectivo que canta la canción que lo explica victoriosa sobre la montaña.
Cuba, Nicaragua, Venezuela, son centrales nucleares de soberanía y paz, de construcción de lo colectivo, de lo social, del bien a todas las generaciones que van a pasar y que van a ser. ¿Han escuchado los nombres de Kursk y Zaporilla?, son centrales nucleares pertenecientes a Rusia y atacadas por los que intoxican, sabotean, bloquean: ucronazis, mercenarios, imperialistas, los mismos que atacan a la triada de la independencia latinoamericana.
En el interior del tanque imperialista, de la bomba imperialista, de la embajada imperialista pululan los que ejercen como embajadores, de la CIA, de la USAID, de la NED, … y otros tantos niveles que sin mostrar su escalafón como correos del imperio, bajando y bajando y bajando por la escalera hasta la calle, vistiendo como los comunes, peinando como el círculo al que van, hablando como el lenguaje integrado, hacen el trabajo del embajador yanqui en el tono y la forma que les requiere para la infiltración de dudas, bulos, exigencias, sospechas, división, desmotivación, hacer montaña con el correr de la desconfianza. Han visto lo mismo que yo y que tu, pero trabajan como embajadores encubiertos, infiltrados difunden simuladamente el ataque a Cuba, Nicaragua, Venezuela, acusan a Rusia, blanquean los ataques a Kursk y Zaporilla, celebran en sus bolsillos y en su vendida cabeza los muertos, y echan la montaña con una lágrima pintada sobre el genocidio en Gaza.
2. Así se divide el mundo: Antiimperialistas frente a Imperialistas. La canción o la montaña, y la canción se canta encima de la montaña. La canción nos lo explica y la admiramos, se ve el horizonte: son necesarios los dirigentes en preparación, hacen falta gentes del pueblo con formación política, cuadros, maestros políticos en cada calle, en cada barrio, en cada ciudad, en cada nación, los doctores de conciencia en unidad popular que hagan la canción, que........