La izquierda, entre la ruptura y la tibieza

En el Manifiesto Comunista(con perdón)Karl Marx escribe que la historia de la humanidad es la historia de la lucha de clases. No vivió lo suficiente como para comprobar que la historia de la izquierda, que en muy buena parte él contribuyó a fundar, ha sido desde entonces la crónica de una sucesión continua y permanente de enfrentamientos internos que han llevado a la cronificación de la escisión, más o menos traumática, de las organizaciones que se han ido configurando en el último siglo y medio. De cada partido constituido surgían, cual si de una ameba se tratara, otros que se disputaban con aquél la condición de depositarios de las esencias ideológicas. En cada coalición formalizada, no tardaban en aparecer los conflictos, hasta que aquélla terminaba saltando por los aires.

El último episodio de este historial de desgarros es el que concierne a Sumar y a Podemos. Su separación, hasta el punto de que la organización que fundara Pablo Iglesias abandona el grupo parlamentario capitaneado por Yolanda Díaz para refugiarse en el mixto del Congreso, ha sido el epílogo de una sucesión de desencuentros, traducida en una hostilidad pública y creciente, entre los liderazgos de ambas organizaciones. En este caso, considero que las discrepancias políticas de fondo comienzan a brotar a partir del enfrentamiento personal y de la pugna entre unos aparatos partidarios que se dan codazos por ocupar la........

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