Chiapas, frontera sur y crimen organizado: El tercer pasajero

Desde hace años Chiapas y la frontera sur mexicana tienen un rol estratégico para la nación y su desarrollo debido a sus sociedades, culturas y economías, como también a causa de procesos internacionales que inciden sobre su espacio, como es la movilidad humana irregular y la influencia de los Estados Unidos sobre la región. Para propósitos de análisis, separemos los determinantes del desarrollo regional en dos tendencias: los internos, los propios de la región y, de otra parte, los externos, los que llegan por factores ajenos.

Desde la mirada interna, el desarrollo de la región chiapaneca –especialmente la ubicada en la frontera con Guatemala– ha evolucionado por años ligada al vecino del sur, basada inicialmente en ancestrales culturas y pueblos indígenas y, después, articulada por una economía agropecuaria del lado mexicano que demandó numerosa fuerza laboral guatemalteca, creando una potente movilidad circular parecida a la que tenemos los mexicanos en la frontera con Estados Unidos.

El trabajo de personas de Guatemala en México ha sido una práctica de décadas, escasamente regulada a pesar de sus importantes dimensiones; hasta la fecha es base de la economía del sur de Chiapas y de su exitosa producción de café y frutales, particularmente. Junto con el comercio transfronterizo, el mercado laboral es decisivo para el conjunto de la economía regional y para las diversas vías que tejen cotidianamente las relaciones locales entre ambos países.

En términos generales, dicho con los matices necesarios, el desarrollo de la región fronteriza chiapaneca ha dependido de las interacciones con Guatemala, que se........

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