«La poética Navidad; conmemoración universal»

Alentados por la buena noticia, el deseo del reencuentro y el abrazo de la ilusión, donde se concentra la mirada clemente y el afán de hacer familia; mientras el niño que todos llevamos consigo, se pone a buscar y a rebuscar sus propios latidos íntimos, para restablecer la visión del poema en los labios; reconozco que el desvelo no puede ser más positivo, pues es nuestra propia existencia la que nos trasciende, para celebrar el don de la vida y concelebrar el empaque de la pureza, como fiesta universal. La contemplativa de un recién nacido suscita normalmente sentimientos de conmoción y de ternura, aparte de movernos y removernos el níveo aliento, para volver a descubrir el calor de un hogar, con el estímulo de la sencillez, la amistad y la solidaridad.

Estamos en un momento meditativo de acogida, de recogerse cada cual consigo mismo, para compartir el gozo de nuestro esfuerzo, que llega a ser más poesía que poder y más luz que........

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