Repito, una vez más, el dicho del economista K. Galbraith. ‘No votamos entre buenos y malos sino entre malos y peores’. Siguiendo lo que dice, creo que ‘los malos’ serían los defensores de la economía de mercado, con liberales y conservadores. Y ‘los peores’, el socialismo, comunismo, fascismo y nazismo. O sea, los intervencionistas estatalistas. Los que restringen la libertad individual, la propiedad privada, y magnifican el poder estatal. Que nunca les parece bastante. Todo por nuestro bien. Bajo el manto del ‘progresismo’. Palabra preferida de Pedro Sánchez. Aunque luego venda España a sus enemigos declarados, para seguir en el sillón. Los socios del socialismo son, el prófugo de la justicia Puigdemont y el condenado por terrorismo, Otegi. Entre otra basura.
Los ‘peores’ siempre han hecho lo mismo. Siempre que han podido. Con las habituales catastróficas consecuencias. O sea, ruina económica y restricción- o eliminación- de libertades. Aunque hay mucha gente que no aprende de los errores pasados y se deja engañar por bonitas y falsas promesas de los demagogos. Por eso suelen controlar los medios de comunicación, porque los convierten en medios de manipulación. A favor de su falso ‘mundo feliz’.
Recuerde. Los antiliberales y anti conservadores, suelen llamarse a sí mismos ‘progresistas’, y califican de ‘fascistas’ a liberales y conservadores. Es algo parecido a lo que dijo (algunos dicen que no lo dijo) Winston Churchill: ‘Los fascistas del futuro se llamarán a sí mismos, antifascistas’. En España tenemos muchos........