El péndulo

Decía Krishnamurti que cuando el hombre se ha convertido en un ser de segunda mano, la utilización de su libertad consiste únicamente en una libre expresión de su sensualidad. El amor se transmuta entonces en placer y deseo, perdiendo su auténtico sentido.

El goce sensual es el que ordena, encadenando poco a poco al individuo, hasta llegar a un punto en que, éste, es ya el único que manda sobre nosotros, esclavizándonos, paradójicamente, en nombre de la manida libertad.

Las desenfrenadas........

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