Fue una fortaleza inexpugnable en el siglo XII y, a mediados de la década de 1950, pasó a ser propiedad del duque Amadeo de Saboya-Aosta. Enclavado en las colinas toscanas, Il Borro es ahora una granja y bodega ecológica. Se extiende sobre 1,100 hectáreas de terreno orgánico entre las colinas del paisaje toscano, en el corazón del Valdarno di Sopra.

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