“Un tercero no identificado publicó datos de un grupo de clientes con la intención de extorsionar al banco”. Con esta inédita revelación, el gerente general de uno de los bancos más grandes del país hizo lo impensable: reconocer públicamente, y en medio de una crisis, que el Interbank había sido blanco de extorsión cibernética. Reveló un secreto a voces que las grandes corporaciones se esfuerzan en ocultar, por el impacto negativo en su reputación.
El caso de Interbank no es el único en el mundo corporativo que recibe ataques cibernéticos, el llamado ranson ware, una modalidad de intrusión digital que secuestra datos sensibles de la empresa y bloquea el acceso al sistema para que el delincuente cibernético exija sumas millonarias a modo de rescate informático.
En el mundo corporativo........