noviembre 13, 2024noviembre 12, 2024 Una mujer con un muñeco de Mazón durante una manifestación que recorre las calles de Valencia para exigir la dimisión del presidente de la Generalitat valenciana. Europa Press
En las películas de catástrofes nunca falta el personaje que, por maldad, estupidez, desconocimiento o todo junto, consigue que la catástrofe sea veinte o treinta veces más gorda de lo que hubiera sido sin su intervención. Es todo un clásico el político que se sacó la carrera en una tómbola, gracias al dinero de papá; que se ríe de los científicos porque llevan bata y porque él tiene un primo -al que no ve desde que iba en pantalones cortos- que llegó a ser el hombre del tiempo en un canal de madrugada. No avisa del maremoto o del tifón o del volcán en erupción hasta que ya es demasiado tarde; la movida le ha pillado pescando truchas, almorzando arroz a banda o tonteando con una señora, a veces practicando las tres actividades a la vez, ya que estos políticos son gente muy ocupada y no suele atender al teléfono así les llame el Papa Francisco.........