junio 9, 2024junio 8, 2024 El neonazi Alberto 'Pugilato' le propina una paliza al cómico Jaime Caravaca durante una actuación - Redes Sociales
"El asunto, hoy, es que los nazis se suben al escenario a pegar a alguien por un chiste, y nosotros discutimos del chiste". Con esta paradoja, casi wildeana, remataba ayer Guillermo Zapata, en este mismo panfleto, su reflexión sobre la agresión del nazi Alberto Pugilato al cómico Jaime Caravaca en pleno espectáculo teatral en una sala de Madrid.
El fascista Pugilato, que esa es su gracia en redes sociales, se subió al escenario con aires matoniles, interrumpió el espectáculo y le soltó dos hostias y unos gritos al artista, que días antes, y con dudoso gusto, había deseado en X que el hijo del nazi saliera gay y le chupara la polla a un negro. Y digo lo de dudoso gusto porque el comentario de Caravaca estigmatizaba la homosexualidad, y no creo que haya sentado nada bien al colectivo. Ítem más: la alusión a la polla del negro en el tuit suena a chiste rancio de Los Morancos o a gracieta de cómico tardofranquista con un solysombra de más. Qué habrán hecho las pollas de los negros para tener tan mala prensa, que hasta les desean introducirse en la boca de un fascista: el tufillo racista del comentario parece más que evidente. Exijo que un cómico, que no deja de ser un poeta humoroso (si es bueno), cuide más sus palabras.
Palabras que le han servido a Pugilato para hacer honor a su apodo y subirse al cuadrilátero de un escenario a soltar mandobles. Lo único que se le puede agradecer a Caravaca es que haya conseguido que un nazi pague la entrada a un teatro. El Ministerio de Cultura le debería otorgar el Premio Nacional de Dramaturgia a Caravaca solo por eso.
Al grito de........