La corrupción impone una reforma judicial disruptiva
Pese a que era insostenible la presión de la población que exige una reforma de la justicia con impronta disruptiva, no simplemente corrigiendo o mejorando aspectos administrativos, la recolección de firmas no alcanzó el límite aspirado; entendiendo que el motivo fue el planteamiento de los reformistas que priorizan lo económico antes que la reforma de base, que es lo que anhela la población, y la voz del pueblo es siempre la voz de Dios, en toda circunstancia.
La juventud no tolera el incumplimiento de las disposiciones de la justicia y, la historia reciente, nos recuerda con diafanidad que fue la juventud, con sus reclamos y acciones, que precipitó su huida y destronó la pretensión de un presidente en funciones que aspiraba a una reelección, pese a lo dictaminado por el pueblo en un referendo válido. Ahora, en una nueva posición abstrusa el exmandatario demuestra su rebeldía al desoír lo determinado por el Tribunal Constitucional, atizando a sus bases.
Toda reforma propiamente dicha debe ser entendida como una mejora sensible en un rasgo social particular, en este caso la justicia y sus operadores, más bien en un aspecto........
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