Cada vez que intentas hacer lo correcto, cada vez que fallas y pides perdón, cuando eres solidario, cuando miras lo que te falta con fe, sabiendo que llegará lo que mereces y agradeces por lo que tiene
Opinión.- Aquí estoy, como cada martes, hasta que Dios lo permita. Muchas veces me preguntan: ¿Por qué inicias tu columna con el mismo primer párrafo? Sencillo. A pesar de ser un laico (fui bautizado en la Iglesia Católica y vivo mi fe en Dios), nunca había sido un practicante activo de la misión de la iglesia. Creo en Él (Dios), sé rezar y, aun así, muchas veces no lo veo y hasta siento que no me acompaña. Hace unos días, fui invitado por una de mis más apreciadas colaboradoras en la empresa a un retiro entre laicos, que me permitió entender la manera en que él existe en mí, y no es diferente a como existe en ti. Cada vez que intentas hacer lo correcto, cada vez que fallas y pides perdón, cuando eres solidario, cuando miras lo que te falta con fe, sabiendo que llegará lo que mereces y agradeces por lo que tienes; cuando te emocionas por las cosas........