La voz de todo

27 de septiembre 2024 - 03:07

Desde pequeños nos enseñan a ser unos fingidores y a evaluar los fingimientos ajenos. Es un mecanismo muy útil para tratar con los demás. La postura del cuerpo, la forma de vestir o acicalarse, la mesura en la voz, el orden en los gestos, la mirada atenta, la boca cerrada, el asentimiento, son formas de entender que debemos tomarnos en serio al que discute con nosotros, al que está con nosotros. Y lo contrario también se aplica: cuidamos lo que mostramos a los demás, o deberíamos cuidarlo, porque nadie nos conoce y nuestra forma de hablar y de movernos y comportarnos son la máscara con que nos introducimos en el mundo, las señas con que abrimos las puertas invisibles que administran nuestras vidas.

En la calle, en casa o el trabajo imponemos límites a........

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