Mientras las preocupaciones se concentran en temas como la incierta constituyente de Petro, este señor avanza sin prisa pero sin pausa en diversas estrategias que tienen como fin enterrar a Colombia en el fangal del comunismo, lodazal en el que todos los países se atollan y del que pocos salen. Sin embargo, a veces no queda claro si este gobierno avanza o retrocede en sus propósitos.
Un ejemplo es que si bien el Gobierno logró que la Cámara le aprobara por fin la reforma pensional, que fue comprada con los dineros de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos (UNGRD), motivo por el que este y otros proyectos de Petro debieron ser congelados hasta tanto no se aclarara la situación, la verdad es que se incurrió en el último debate en un vicio procedimental tan grande que esta reforma debe caerse en la revisión de la Corte Constitucional.
El hecho es que en la Cámara no fue debatido........