Es Sánchez, no Díaz

La advertencia del título, se pensará que, probablemente, sea estéril, aunque aclara lo que no siempre es evidente, en las atribuciones de éxito y fracaso, ni en las de culpabilidad e inocencia.

La cuestión gana importancia cuando los sometidos a identificación se comportan desde perfiles bien diferentes: en un caso, huidizo, alejándose de cercanías naturales, sonriente, aún en situaciones contrarias a su perfil, porque siempre cabe cambiar de opinión, dice.

En el otro caso estamos ante quien prodiga su presencia, buscando ser reconocida por su capacidad de hacer y deshacer. Naturalmente, sin abundar en los fracasos, pero sin rehuir explicaciones que, por grotescas que parezcan, su serenidad es tal que resultará creíble, por falaz que fuere.

Cuando dos perfiles, tan distantes, convergen en un mismo escenario,........

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