'Delenda est Constitutio'

Dice la prensa que la mayoría de los votantes socialistas y comunistas creen que la Constitución ya no es válida. Bien elegido en este caso el verbo creer, ya que de la creencia a la opinión va largo trecho, el que separa la reflexión personal del contagio colectivo. Porque las masas, incapaces de crear sus propias opiniones, se limitan a repetir las que otros han elaborado para ellas. Y larga y concienzuda elaboración es la que han hecho los partidos de izquierda, principales beneficiarios del sistema instituido por una constitución de la que ahora, tras haberla disfrutado, exprimido, jugado y desobedecido a placer, se han aburrido y pretenden sustituir por un juguete nuevo.

Décadas lleva la izquierda denunciando la obsolescencia de la Carta Magna. Pero lo interesante es que no pretenden cambiarla para conseguir objetivos izquierdistas, sino separatistas. Desde hace décadas, la izquierda no pierde oportunidad de insistir en los principios que añoran para una futura constitución: federalismo, nación de naciones, autodeterminación, confederación, multinacionalidad… Y las reivindicaciones izquierdistas, ¿para cuándo?

No es de extrañar, pues, que tras tanta insistencia las masas hayan acabado absorbiendo todo eso por ósmosis y creyendo que son ellas las que han llegado a la voluntad reformadora por su propia reflexión.

El de la Constitución de 1978 es un caso........

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