Piensan que eres idiota

Los gobernantes deben estar lo bastante lejos como para que no puedan meter el hocico en tu cama, y lo bastante cerca para que podamos patearles el trasero. Todas las tentaciones globalistas que pretenden un gobierno mundial, en realidad, presuponen que ellos lo harán mejor. Gobernar es como conducir. Siempre piensan que conduces mejor que el de al lado. Y ellos piensan que, por ricos o poderosos, sabrán decidir mejor desde Washington, desde Ginebra o desde Bruselas lo que necesita y lo que quiere para su vida un campesino de Illinois, un mecánico de coches de Berlín, o un ganadero de Almería. ¿Por qué? Por la misma razón que piensas que conduces mejor que los demás: porque todos los demás son idiotas.

Lo que une a Biden, a Soros, a Von der Leyen, a Guterres, a Gates, y a Schwab no es un plan mundial para dominar el mundo. Incluso ellos saben que serían incapaces de ponerse de acuerdo para eso. Lo que realmente les une es algo mucho más humano: creen que todos somos idiotas. Ellos no, porque han alcanzado la fama, el poder, o la riqueza. Por eso creen que pueden dirigirnos, porque somos inferiores.

En toda apuesta socialdemócrata, comunista, o socialista late el mismo asunto de fondo: creen que ellos pueden decidir mejor que nosotros sobre nuestros hijos, sobre nuestro dinero, o sobre nuestra salud. ¿Por qué? Porque somos idiotas.

Creen que pueden decidir mejor cómo cuidar nuestros ecosistemas más cercanos. ¿Por qué? Porque somos idiotas.

Creen que pueden cuidar mejor a nuestros animales. ¿Por qué? Porque somos idiotas.

Creen que pueden cuidar mejor de nuestros pulmones, de nuestro corazón, y de nuestra vida sexual. ¿Por qué? Porque somos idiotas.

Creen que pueden manejar mejor el trato con nuestras mujeres, amigas, y madres. ¿Por qué? Porque somos idiotas.

Creen que pueden gestionar mucho mejor........

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