La ventaja de proclamar como razón única y última de la catástrofe de Valencia que "el cambio climático mata" es que devuelve un asunto que debería ser técnico al ámbito de las posturas ideológicas y morales. Como el clima no es algo que pueda controlar ni Su Sanchidad ni nadie, es la perfecta cabeza de turco. Se enuncia diferenciando entre los buenos creyentes en la fe climática y los malvados negacionistas y así tanto él como sus huestes pueden dormir tranquilos sabiendo que la culpa de todo lo que ha pasado en Valencia no es suya. La responsabilidad siempre ha de recaer en la derecha o, mejor, en la extrema derecha. La razón es variable, pero el axioma permanece.
Exactamente por el mismo motivo no han hecho más que atacar en redes sociales a la asociación juvenil Revuelta, ligada a Vox, por "nazis". Que haya sido la organización más eficaz en recoger aportaciones y voluntarios y llevarlos a los pueblos asolados........